APRENDIENDO CON TECNOLOGÍA
En esta introducción se intenta dejar en claro cuales son las diferencias que deben superarse para trabajar y vivir en el siglo XXI, cómo podrían ser las escuelas y una serie de cambios sociales, pedagógicos y que podrían transformar toda la actividad educativa.
Para satisfacer estas nuevas demandas, los alumnos deberán adquirir una nueva serie de destrezas, saber emplear una variedad de herramientas para buscar y clasificar información en cantidad, generar nuevos datos, analizarlos, interpretar su significado y transformarlos en algo nuevo. Deberán, además, desarrollar la capacidad de trabajar con otros para elaborar planes, negociar un consenso, transmitir ideas, solicitar y aceptar críticas, reconocer el mérito de los demás, pedir ayuda y crear productos en forma conjunta.
El aprendizaje ya no quedaría encapsulado en función del tiempo, el lugar y la edad, sino que ha pasa a ser una actividad y una actitud colectiva que continúa durante toda la vida con el apoyo de todos los sectores de la sociedad.
Por otro lado, los docentes instan a los alumnos a alcanzar niveles más profundos de comprensión y guiarlos en la construcción y la aplicación colectiva de conocimientos con el contexto de los problemas.
Por último, en este enfoque, las conexiones entre la escuela y el trabajo les permitirán a los alumnos aprender en el contexto de los problemas de la vida real, posibilitando relacionar lo que está sucediendo en el mundo con lo que ocurre en la escuela.
UNA VISIÓN DE LA EDUCACIÓN EN EL SIGLO XXI
Perspectiva social
Conectar el aprendizaje con el hogar y con los padres
Las limitaciones de tiempo en la enseñanza eran un serio obstáculo para la reforma educativa. Por lo que es importante aumentar el tiempo para ganar tiempo de aprendizaje tomando como inclusión a los hogares.
Cuando los padres se hacen partícipes de ese aprendizaje junto a sus hijos, los alumnos obtienen mejores calificaciones y una mayor puntuación en los exámenes. Además, los padres participantes tienen expectativas más elevadas para sus hijos y sus escuelas; y de esta manera, las escuelas funcionan mejor cuando ellos intervienen.
En conclusión, el rendimiento de los alumnos alcanza su máximo nivel cuando las familias, las escuelas y las organizaciones comunitarias trabajan en forma conjunta.
Conectar el aprendizaje con el lugar de trabajo y la comunidad
Algunos informes indican que en EE.UU. no se está brindando una educación que prepare a los jóvenes a insertarse en el ámbito laboral, el cual es altamente competitivo y dependiente de la tecnología del siglo XXI.
En este caso, los docentes cumplen la importante función de orientar la transferencia de conocimientos entre la escuela y el lugar de trabajo.
Con este enfoque relacionado con el trabajo, los alumnos deberán abordar tareas que:
*tengan analogía con otras tareas del mundo adulto;
*sean complejas y de final abierto;
*se relacionen con situaciones prácticas;
*puedan ejecutarse de diversas maneras y tengan más de una respuesta o resultado correcto;
*sean realizadas por equipos de alumnos;
*se efectúen con la misma información y los mismos tipos de herramientas tecnológicas empleadas por los profesionales;
Den lugar a un producto que les haga sentir a los alumnos que están haciendo un aporte a la comunidad.
Perspectiva pedagógica
El aprendizaje basado en proyectos
Un objetivo fundamental, es aumentar la habilidad de los alumnos para resolver problemas y demostrar competencia en materias complejas (ejemplo: matemáticas y ciencia). Estos objetivos son llevados a cabo por el “proyecto de aprendizaje”.
El aprendizaje basado en proyectos requiere que los alumnos identifiquen un problema o un objetivo de interés personal o grupal, y que creen actividades y productos destinados a resolver el problema o cumplir el objetivo. Este trabajo les genera motivación puesto que, los alumnos trabajan con situaciones de su mundo real.
Este proyecto también sirve para valorar e integrar conocimientos procedentes de múltiples perspectivas y disciplinas; y la búsqueda de las soluciones para resolver los problemas se ve favorecida por las diversas experiencias de alumnos y docentes, ya que no es factible que una sola persona tenga la verdad absoluta.
En conclusión, el aprendizaje basado en proyectos, aumenta la complejidad de planificación y la responsabilidad.
Los docentes son los encargados de fomentar las aptitudes especiales de cada alumno y adecuar las necesidades individuales dentro del grupo.
Andamiaje
Los “andamios” son elementos auxiliares externos que brindan un soporte cognitivo y social a quienes son principiantes en un trabajo o un dominio de conocimiento dado.
Estos elementos pueden consistir en preguntas, sugerencias o procedimientos propuestos a los alumnos. Al brindar ese soporte, el andamiaje les permite a los alumnos abordar tareas más complejas que las que ellos pueden manejar por sí solos.[1] A medida que los estudiantes van perfeccionándose e internalizandose las nuevas destrezas, los andamios pueden retirase y de esta manera los alumnos podrán ejecutar una mayor parte de la tarea por su cuenta.
Perspectiva tecnológica
Servicios y agentes integrados de comunicación personal
Los métodos actuales para tener acceso a Internet parten de la base de que los usuarios envían, reciben y guardan documentos a través de un único proveedor de servicios; servicios electrónicos que están separados de otros servicios de información y de audio, lo que ocasiona dificultades y obstáculos para los usuarios.
Mediante poderosos equipos de información inalámbrica, los estudiantes podrán trabajar en sus proyectos según les convenga, independientemente del sitio en el que se encuentren.
Como resultado de este tipo de integración de los servicios, el volumen de información y la cantidad de personas a las que se tendrá acceso en las redes electrónicas aumentarán notablemente. Se necesitara de herramientas para hacer que esta explosión de recursos resulte útil.
Simulación y realidad virtual
La oportunidad de hacer de un fenómeno dado les proporciona a los alumnos un nuevo y significativo medio de representar y manejar su comprensión del mundo.
Mediante utilización de realidades virtuales multisensoriales e inmersivas, los alumnos y los docentes podrán llevar a cabo actividades y elaborar nuevos conocimientos, en una serie de sistemas imposibles de experimentar en el mundo real.
Avanzar hacia la visión
La educación debe pasar a ser una preocupación central de la comunidad y las prácticas pedagógicas innovadoras deben generalizarse.
Hay dos necesidades más inmediatas: la capacitación de los docentes y el acceso igualitario a la tecnología. Éste es el primer paso hacia la visión de la reforma educativa y la tecnología en el siglo XXI.
Planear para el futuro
Aunque las tecnologías mencionadas no están al alcance de la mayoría de los docentes, las escuelas ya pueden prepararse para el futuro que aquí hemos previsto.
Pautas para orientar a las escuelas hacia las tecnologías del siglo XXI.
1) Capacitar a los docentes para que utilicen la tecnología y la incorporen al currículo.
2) Contratar a un experto en tecnología para contar con una asistencia tecnológica.
3) Alentar a los docentes y alumnos a que comiencen a usar Internet para familiarizarse con la tecnología.
4) Proporcionar servicios de correo electrónico.
5) Establecer en la escuela un servicio Web que los docentes y alumnos puedan utilizar.
6) Poner el equipo a disposición de los docentes para que puedan consultarlos y/o llevárselos a su casa a efectos de preparar clases
7) “Jugar” con la tecnología avanzada en todas las ocasiones posibles, incluyendo exhibiciones, museos y sitios Web.
El autor nos plantea en este texto dos puntos de partida que son fundamental en el proceso de aprendizaje; por un lado, un cambio en el enfoque en la capacitación docente; y por otra parte, un acceso que sea igualitario para todos, donde principalmente la escuela sirva de fuente de información, tanto para el docente como para el alumnos.
Estos puntos, marcarían sin duda un cambio radical en la educación, haciendo más flexible el proceso de aprendizaje, también más colaborativo y sobre todo una manera de crear un vínculo más afianzado entre alumno y docente.